Los investigadores han estudiado los restos de enterramientos en el territorio del asentamiento de Khorig, en la zona montañosa de Khubsugul. En este antiguo cementerio fueron enterradas personas en el siglo XIII.
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En 2018-19, cuando se descongeló el permafrost, los científicos descubrieron 11 restos humanos bien conservados. Las momias estaban vestidas con telas lujosas y tenían objetos caros cerca. Los análisis de proteínas en los sedimentos de los dientes mostraron que estas personas comían leche de yegua, oveja, cabra y vaca, pero sobre todo leche de yak.
Especialmente interesante fue el descubrimiento de una momia femenina con un sombrero de corteza de abedul en la cabeza. El cuerpo estaba envuelto en un manto de seda con un dragón dorado. Esta representante de la élite mongola también consumía activamente leche de yak.